Aire fresco
Una brisa de aire fresco nos ha inundado esta pasada noche de viernes. Un grupo de jóvenes arevalenses nos han arrastrado, con su ilimitado entusiasmo, a un recorrido teatralizado por las viejas calles del Arévalo histórico.
Nos han contado una historia de amor y celos, de pasión y crímenes, de vida y muerte, de príncipes y princesas. Y todo ello aderezado con paradas en emblemáticos rincones: La Alhóndiga, el claustro de San Martín, las Gemelas, el ya minúsculo ciprés de la plaza de la Villa, el portón de la iglesia de Santa María. Luego bajar paseando hasta San Pedro, callejear un poco hasta el, ahora iluminado, Castillo y terminar en la vieja plazuela de San Miguel. En cada parada unos versos. Y prosigue la historia de amor y celos, y de príncipes, princesas y asesinos. Y las sonrisas. Y los aplausos. Y la felicidad en las caras de esas muchachas y muchachos que con este gran aporte de entusiasmo, con ese empuje de simpática vitalidad, nos han traído esta brisa de aire fresco. Un grupo de jóvenes arevalenses que nos han arrastrado a un recorrido teatralizado aderezado con poesía, por las viejas calles del Arévalo histórico.
Nos han contado una historia de amor y celos, de pasión y crímenes, de vida y muerte, de príncipes y princesas. Y todo ello aderezado con paradas en emblemáticos rincones: La Alhóndiga, el claustro de San Martín, las Gemelas, el ya minúsculo ciprés de la plaza de la Villa, el portón de la iglesia de Santa María. Luego bajar paseando hasta San Pedro, callejear un poco hasta el, ahora iluminado, Castillo y terminar en la vieja plazuela de San Miguel. En cada parada unos versos. Y prosigue la historia de amor y celos, y de príncipes, princesas y asesinos. Y las sonrisas. Y los aplausos. Y la felicidad en las caras de esas muchachas y muchachos que con este gran aporte de entusiasmo, con ese empuje de simpática vitalidad, nos han traído esta brisa de aire fresco. Un grupo de jóvenes arevalenses que nos han arrastrado a un recorrido teatralizado aderezado con poesía, por las viejas calles del Arévalo histórico.
Comentarios